URSULA, ISMAEL Y LAS LUCIDAS POESIAS
Las tórridas poesías los acompañaron
toda una vida
tan amanecer, tan destino.
Hace largos años
encendieron las lámparas del amor
y esas luces de tus ojos
en mi pecho sumergidas
otro gozo no anhelan.
A través de los juegos renovados
el romance, la creación toda se manifiesta.
Los hijos partieron en la juventud
y una nueva diáspora
se abrió en sus días.
Mi barba te sigue molestando en cada beso
y tu cuerpo continuará siendo mi patria
como desde la primera tarde.
Renunciaron al amor para toda la vida
pero ni así hay garantías de lo perdurable.
La meseta de la convivencia
la noche que dormí afuera.
Tu sutileza coronada
y el relato de tus negativas.
Estas palabras son la ciudadela
de sus almas.
Ellos comprenderán al fin y al cabo
que recibir y renunciar no importa en absoluto.
Ursula, Ismael…
las lúcidas poesías los acompañaron siempre.-
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