martes, 27 de noviembre de 2012

NOS ENCONTRAMOS (NO HAY OTRO TIEMPO, SOLO ECHAR VUELO)

La voz del alba cantan gorriones.
El bello aroma: panaderías.
Por las mañanas facturas tibias.
Los nervios duros durante el día
los masticaste mientras dormías.

Por cada sueño tan bastardeado
tanta miseria a pesar nuestro.
Revisaremos contestadores
de celulares sin los mensajes.
Dejar la borra allí en la taza
no hay otro tiempo, sólo echar vuelo.

El asesino que fue al velorio
la tos convulsa del cigarrillo.
El dulce orgasmo que compartimos
piernas cruzadas que fuiste abriendo
nos encontramos, acaso el cielo.

Las abstenciones, los mimetismos,
llevarte viva, los pensamientos.
Las avenidas, los crisantemos,
no hay otro tiempo, sólo echar vuelo.

Libros usados sobre la mesa
narices rojas del crudo invierno.
Cambiamos algo no quieres verlo
se parte el mundo pero nacemos.
Con los extremos como espolones
vamos andando ya no hay manuales.
No te sorprendas: nada perdura
se parte el mundo, pero nacemos.

Instituciones vamos rozando.
Muy pocos rastros de lo que fuimos.
El poderío de nuestros pechos
nadie lo apresa surca los cables.
Múltiples vidas, cuánticos saltos
desperdiciamos algo del día.
Cada minuto mar en la sangre.
Muerte al panóptico nos encontramos.

En los rincones salvaje instinto
tantas personas muchos desvíos.
Sincronizamos dos corazones
burla al circuito nos encontramos.
Se parte el mundo pero nacemos
no hay otro tiempo, sólo echar vuelo.-
AL CONTROL POLICIAL DEL PENSAMIENTO, HACIA ALLI VAN

Mi generación fue testigo
del manoseo grosero a la imaginación.
Vamos, ya lo sabes,
calabozos mentales en nombre
de infames eufemismos
y enfilan como dardos
el progreso, el orden, la efectividad,
el desarrollo.

La última de las cadenas
más sutil que el acero.
Digitaste el consumo
pero ya no alcanza
controlando el tiempo libre
del hogar que se devasta.

No es ciencia ficción
tu costo beneficio
tu parche en la migaja de mi falla
que exculpa la voracidad de tu demonio.

Dijimos ya estamos en medio del abismo
frenemos...sacudamos el polvo.
Palmeaste nuestro hombro
y no contó ni la compasión
por tu descendencia.

Asfixia de gestión plazos
y el pescuezo en riesgo
permanentemente.
Bloqueo total al prójimo
¿qué duda cabe
que el próximo escalón es el pensamiento?